Cómo limpiar un sofá: trucos para que quede como nuevo

Si bien el sofá es uno de los muebles más utilizados y cómodos de nuestro hogar, también es uno de los más propensos a ensuciarse. Las manchas, la suciedad y los olores pueden acumularse en el tejido del sofá con el tiempo, y pueden ser difíciles de eliminar si no se limpian adecuadamente. Aquí te ofrecemos una guía paso a paso sobre cómo limpiar tu sofá para mantenerlo en buen estado.

Identifica el tipo de tejido

Antes de comenzar a limpiar tu sofá, es importante identificar el tipo de tejido. El tipo de tejido determinará los productos y técnicas de limpieza que se pueden utilizar de manera segura sin dañar la tela. Para identificar el tipo de tejido, busca una etiqueta en el sofá que proporcione información sobre el material de la tela y las instrucciones de cuidado. Estas etiquetas generalmente se encuentran en la parte inferior del cojín o en la parte posterior del sofá.

Aspira el sofá

Antes de aplicar cualquier solución de limpieza en tu sofá, es importante eliminar la suciedad y el polvo suelto que puedan estar en la superficie. Utiliza una aspiradora con un accesorio de cepillo suave para eliminar el polvo y la suciedad de la superficie del sofá, prestando especial atención a las áreas donde las personas se sientan con más frecuencia.

Limpia las manchas

Si tu sofá tiene manchas, utiliza un limpiador de tela adecuado para el tipo de tejido que identificaste en el paso 1. Prueba el limpiador en una parte discreta del sofá para asegurarte de que no dañará la tela. Sigue las instrucciones del limpiador y aplica la solución de limpieza en la mancha con un paño limpio y húmedo. Frota suavemente la mancha con el paño, evitando frotar demasiado fuerte o demasiado tiempo para no dañar la tela. Luego, utiliza un paño limpio y seco para eliminar cualquier exceso de humedad.

Elimina los olores

Si tu sofá tiene olores, utiliza bicarbonato de sodio para eliminarlos. Espolvorea bicarbonato de sodio generosamente sobre la superficie del sofá y déjalo reposar durante varias horas o durante toda la noche si es posible. El bicarbonato de sodio absorberá los olores. Después de un tiempo, utiliza un cepillo suave para eliminar el bicarbonato de sodio restante de la superficie del sofá.

Limpia los cojines

Si los cojines del sofá son removibles, puedes lavarlos en la lavadora siguiendo las instrucciones de cuidado del tejido. Si no son removibles, puedes limpiarlos con un paño húmedo y un poco de jabón suave. Es importante no sumergir los cojines en agua y evitar el uso de productos de limpieza fuertes que puedan dañar el tejido. Luego, asegúrate de secar bien los cojines antes de volver a colocarlos en el sofá para evitar la acumulación de humedad y la formación de moho.

Mantén tu sofá limpio

Para mantener tu sofá limpio, es importante aspirarlo regularmente y tratar las manchas tan pronto como se produzcan. Además, es importante evitar comer o beber en el sofá para reducir la probabilidad de derrames. Si tienes mascotas, es recomendable cepillarlas regularmente para reducir la cantidad de pelo que puedan dejar en el sofá. También puedes considerar la posibilidad de cubrir el sofá con una funda o protector de tela lavable para protegerlo de los derrames y la suciedad. Si fumas en la casa, es recomendable hacerlo afuera o en una habitación separada para evitar que el humo y el olor se impregnen en el sofá. Siguiendo estas recomendaciones, podrás mantener tu sofá limpio y en buen estado por más tiempo.

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